El bruxismo infantil —el hábito inconsciente de apretar o rechinar los dientes— es más común de lo que parece. Muchos padres en Málaga acuden a nuestra clínica preocupados por los ruidos que escuchan cuando sus hijos duermen o por el desgaste prematuro de los dientes temporales. Aunque a menudo es pasajero, en algunos casos puede tener consecuencias en el desarrollo oral y general del niño.
En la Clínica Dental Ruiz+Blasco, especializada en odontopediatría, abordamos el bruxismo infantil desde una perspectiva integral, buscando tanto el alivio de los síntomas como las causas que lo provocan.
¿Qué es el bruxismo infantil?
Es el acto involuntario de apretar o rechinar los dientes, especialmente durante el sueño. Puede presentarse desde edades muy tempranas y afectar tanto a dientes de leche como a los definitivos.
¿Es normal que los niños rechinen los dientes?
Hasta cierto punto, sí. Durante el crecimiento, es frecuente que algunos niños bruxen de forma intermitente, sobre todo entre los 4 y los 10 años. Sin embargo, si el hábito se mantiene en el tiempo o genera molestias, debe ser evaluado por un odontopediatra.
Principales causas del bruxismo en niños
- Factores emocionales: estrés, ansiedad, cambios escolares, conflictos familiares.
- Maloclusiones o interferencias dentales
- Apnea del sueño o respiración oral
- Parásitos intestinales (en menor medida, pero considerado en diagnósticos integrales)
- Hiperactividad o trastornos del sueño
- Erupción dental en niños muy pequeños
Señales de alerta que los padres deben observar
- Ruidos al rechinar los dientes durante el sueño
- Dolor de cabeza al despertar
- Desgaste prematuro del esmalte dental
- Sensibilidad al frío o calor
- Dificultad para masticar
- Dolor en mandíbula o articulación temporomandibular (ATM)
- Cambios en el sueño o irritabilidad matinal
¿Qué consecuencias puede tener si no se trata?
- Desgaste dental severo
- Dolor mandibular y de cabeza recurrente
- Alteraciones en el desarrollo maxilofacial
- Trastornos del sueño o dificultades escolares
Por eso es fundamental identificarlo y tratarlo de forma precoz.
Tratamientos efectivos para el bruxismo infantil
1. Revisión odontopediátrica personalizada
Evaluamos si existen interferencias dentarias, problemas oclusales o factores anatómicos que puedan estar provocando el hábito.
2. Férulas blandas (en casos indicados)
En niños mayores, se pueden utilizar férulas nocturnas flexibles que amortigüen la presión sin afectar el crecimiento dental.
3. Terapias complementarias
Cuando el origen es emocional, recomendamos apoyo psicológico o técnicas de relajación. También puede ser útil la fisioterapia en casos de tensión muscular.
4. Reeducación funcional
En algunos casos se trabaja la respiración nasal, la deglución y el descanso postural. Esto es especialmente eficaz en combinación con ortodoncia funcional o dentosofía.
5. Control del entorno y rutinas
Establecer horarios regulares de sueño, evitar pantallas antes de dormir y reducir estímulos estresantes ayuda a mejorar la calidad del descanso.
¿Es siempre necesario tratarlo?
Depende del origen y la intensidad. Si el bruxismo es leve, no genera molestias y está ligado a una etapa de desarrollo, puede simplemente vigilarse. Sin embargo, si hay daño dental, dolor o alteraciones del sueño, es esencial intervenir.
Protege la salud oral y emocional de tu hijo desde pequeño. Si sospechas que tu hijo aprieta o rechina los dientes, no esperes a que aparezcan daños. En la Clínica Dental Ruiz+Blasco evaluaremos su caso de forma cercana, profesional y personalizada, aplicando el tratamiento más adecuado según su edad y desarrollo.